La serpiente

¿Qué pasó con la serpiente
que no grita, qué no muerde más?
Traigan otra virgencita
que esta esquina ya es un basural

¡No te atrevas a decir Señor!
¡No te atrevas a decir Señor!

Cancioncitas de la gente,
coplas de un alma extraviada
van perdiendo tanta vida
por creer en la serpiente.

Voces que no tienen tiempo,
miradas ya extraviadas
van perdiendo tanta vida
por las culpas recordadas.

Una cruz en tu ventana
y otra que nos piden al pasar.
El pecado siempre existe
y ellos siempre van a perdonar.

¡No te atrevas a decir Señor!
¡No te atrevas a decir Señor!

Cancioncitas de la gente,
coplas de un alma extraviada
van perdiendo tanta vida
por creer en la serpiente.

Voces que no tienen tiempo,
miradas ya extraviadas
van perdiendo tanta vida
por las culpas recordadas.